Hace unos poco días Ripple envío una carta abierta al Congreso de los EE.UU., solicitándoles una mejor regulación para el mercado de criptomonedas.
“Estimado Congreso, por favor no nos pinten con un pincel. Muchos en la industria de blockchain y las moneda digital son actores responsables. Somos responsables ante el derecho estadounidense e internacional”.
Este es el comienzo de la carta abierta al Congreso de los Estados Unidos de América escrita por Ripple y firmada por el CEO Brad Garlinghouse y el cofundador Chris Larsen.
La alta gerencia de Ripple está personalmente involucrada en pedirle al Congreso que cree un conjunto de leyes para regular la industria, pero no en detrimento de las empresas estadounidenses de blockchain que operan de manera responsable.
Suena como un sincero llamado de los altos ejecutivos de Ripple, quienes también escriben que “sin claridad regulatoria, corremos el riesgo de impulsar la innovación, los ingresos fiscales y los empleos que estas nuevas tecnologías crean en el extranjero”.
Una apelación que tiene una base concreta, es suficiente pensar en la reciente elección de Circle para migrar el intercambio de Poloniex a Bermuda, donde la regulación es más favorable.
Las criptomonedas no quieren reemplazar al dólar
Ripple asegura que, desde su punto de vista, las criptomonedas son complementarias de las monedas fiduciarias y del dólar estadounidense, no un reemplazo para ellas.
Del mismo modo que no se trata del papel de los bancos centrales en “emitir monedas y establecer la política monetaria “, y la función esencial que los gobiernos tienen en la creación de la confianza necesaria a su alrededor para que los ciudadanos puedan aceptar una moneda.
Ripple quiere mover dinero al extranjero de la misma manera que se mueve la información
La carta abierta de Ripple al Congreso también parece pedir un salto cultural real cuando dice:
“Las empresas como la nuestra en los Estados Unidos y otras en el extranjero emplean estas innovaciones en asociación con instituciones financieras reguladas para permitir que el mundo transfiera dinero a través de las fronteras como si ya moviera información, de manera eficiente, confiable y económica”.
La oportunidad de los Estados Unidos
“Como sucedió con Internet, Estados Unidos tiene la oportunidad de liderar el camino, fomentando esta oportunidad económica mientras continúa protegiendo la privacidad y la estabilidad”.
Brad Garlinghouse y Chris Larsen finalizan la carta abierta al Congreso con una conclusión alentadora:
“Tienes la atención del mundo. Unámonos y aprovechemos el momento”.