La cadena de bloques como herramienta para combatir las medicinas falsificadas: este es el esbozo de un proyecto que se implementará en Afganistán.
De hecho, la nación asiática es uno de los lugares más afectados por el fenómeno, que es muy peligroso para la salud pública. Según las encuestas realizadas por la Oficina Europea de Apoyo al Asilo, el 40% de los medicamentos y equipos médicos son falsificados. Si bien según la Organización Mundial de la Salud, en los países pobres, 1 de cada 10 medicamentos es de mala calidad o es falso.
Además, en 2017 las autoridades de Afganistán incautaron más de 100 toneladas de medicamentos falsificados, vencidos o de baja calidad.
Estas cifras son suficientes para comprender la necesidad de resolver un problema que representa un grave riesgo para la salud de quienes podrían estar tomando estos medicamentos.
Un proyecto de blockchain para combatir medicamentos falsificados
Para combatir este fenómeno, el gobierno afgano está lanzando el proyecto Smart Medicine, junto con tres compañías farmacéuticas con las que se asoció en noviembre de 2019. Estas son:
- Royal Star Pharma, uno de los mayores distribuidores farmacéuticos en Afganistán;
- Nabros Pharma, fabricante farmacéutico indio;
- Bliss GVS, una compañía farmacéutica que cotiza en la Bolsa Nacional de Valores de India.
Junto con la startup de blockchain Fantom, establecerán un sistema que tiene como objetivo resolver el problema del suministro de medicamentos en el país. Este problema también se ve afectado por la falta de controles adecuados.
En detalle, el objetivo es certificar medicamentos, utilizando la tecnología blockchain. Fantom utilizará la colaboración de Chekkit y otros socios para la infraestructura tecnológica que servirá para garantizar que no haya manipulación.
Las etiquetas de envío serán creadas, escaneadas en cada etapa del proceso de distribución con un hash que contenga datos inmutables que incluyen.
- nombre del producto,
- numero de lote,
- fecha de caducidad.
Cada producto tendrá un hash único, cuya autenticidad se puede verificar en la cadena de bloques.
El acuerdo involucrará hasta 80.000 productos médicos, divididos de la siguiente manera:
- 50.000 desinfectantes para manos;
- 10.000 cremas para las articulaciones;
- 10.000 tabletas masticables de Kofol …
- 10.000 cremas para pies.
Como explica el CIO de Fantom, Michael Kong:
“Estamos encantados de avanzar este proyecto vital a la siguiente etapa. Nos gustaría extender nuestro agradecimiento al Ministerio de Salud Pública, que ha apoyado nuestra visión desde el principio. Con la asistencia de Royal Star, Nabros Pharma y Bliss GVS, aseguraremos la autenticidad de los productos farmacéuticos y haremos una contribución importante al sistema de salud del país”.
Para Ghulam Sayed Rashed, Director Ejecutivo de la Autoridad Reguladora Nacional de Productos de Medicina y Cuidado de la Salud del Ministerio de Salud Pública:
“Este programa es la primera aplicación de blockchain en Afganistán; Estamos muy contentos de aplicarlo en el sector de la salud para detener la falsificación de medicamentos al facilitar el seguimiento de los productos farmacéuticos. Es un proyecto importante para nuestra nación, y lo respaldamos plenamente. Después del programa piloto, realizaremos una ceremonia de celebración y apoyaremos la iniciativa para seguir avanzando”.
De hecho, están comenzando con productos farmacéuticos, pero Fantom planea expandir el proyecto. En un segundo paso, el acuerdo con el gobierno afgano planea aplicar la cadena de bloques también a los registros médicos del hospital.
De hecho, este es un uso innovador de blockchain, que parece ganar más importancia en el sector médico.
El COI de Fantom, Michael Kong, agrega a este respecto:
“Estamos increíblemente emocionados de ser el primer y principal socio de blockchain para el Ministerio de Salud afgano”. La iniciativa para abordar la falsificación de medicamentos en la región es esencial para la salud pública, ya que nos permite identificar los eslabones débiles y los problemas en la cadena de suministro médico, y le da al gobierno datos procesables. En una época en la que la confianza en la atención médica (como las vacunas, por ejemplo) se ve comprometida por demasiados factores diferentes, cualquier cosa que se pueda hacer para ayudar tendrá un impacto significativo en nuestra opinión”.