Santander ha adquirido parte del negocio principal de Wirecard. Así lo anunció el propio banco español. Esta no es una compra a gran escala del gigante de pagos alemán, que es objeto de un gran escándalo financiero.
De hecho, Santander ha llegado a un acuerdo con el administrador concursal Michael Jaffé para adquirir activos de alta tecnología especializados en pagos comerciales.
La adquisición será fundamental para la expansión de Getnet, una de las filiales de Santander, en el mercado europeo. De hecho, los productos adquiridos por Wirecard permitirán la expansión del comercio electrónico y el comercio multinacional así como los medios de pago. No es casualidad que los activos adquiridos incluyan soluciones de pago.
El pasado mes de octubre Santander anunció su intención de combinar sus actividades de pago, incluida Getnet, en una única solución denominada PagoNxt, que tendrá que competir con otras realidades globales. La nueva empresa se centrará en:
- soluciones para comerciantes;
- soluciones comerciales para pymes que comercian internacionalmente;
- productos y servicios de consumo digital.
Con el acuerdo, 500 empleados de Wirecard pasarán a ser empleados de Santander sin ser reubicados.
Santander, obviamente, no asumirá responsabilidad legal por los hechos relacionados con Wirecard AG y Wirecard Bank AG que están siendo investigados por las autoridades alemanas.
Ana Botín, CEO de Santander declaró:
“En Santander, nuestro objetivo es brindar las mejores soluciones y servicios de pago a nuestros clientes. Los activos y el talento que ganaremos como parte de la adquisición nos ayudarán a acelerar los planes de expansión de Getnet en Europa, al mismo tiempo que aumentaremos nuestra capacidad de desarrollo de productos”.
Santander resucita Wirecard tras el escándalo
La adquisición de Santander devuelve a Wirecard a la vida después del escándalo que vivió. El gigante de pagos alemán reveló el pasado mes de junio un déficit de 1.900 millones de euros que se depositaría en bancos fiduciarios de Filipinas pero que no existía.
El exdirector ejecutivo Markus Braun está detenido, mientras que se emitió una orden de arresto internacional para otro ex miembro de la junta, Jan Marsalek, que no ha estado disponible desde junio.