Durante más de una década, los ciclos de cuatro años de Bitcoin han sido una brújula para inversores, traders y analistas. Basados principalmente en el evento del halving —la reducción a la mitad de la recompensa por bloque minado, que ocurre aproximadamente cada cuatro años—, estos ciclos generaban expectativas de subidas masivas de precio seguidas por caídas pronunciadas. Sin embargo, todo indica que este modelo podría haber llegado a su fin.
El director de inversiones de Bitwise, Matt Hougan, ha declarado recientemente que estos ciclos ya no son relevantes en el contexto actual del mercado. Según Hougan, las dinámicas que los sostenían se han desvanecido o han sido reemplazadas por nuevas fuerzas estructurales.
En este informe, analizamos a fondo qué ha cambiado, por qué los ciclos de cuatro años de Bitcoin podrían estar obsoletos y qué implicaciones tiene esto para el futuro de la inversión en criptomonedas.
TE PUEDE INTERESAR: Bitcoin se mantendrá en zona de sobrecompra durante meses, advierte PlanB
El origen de los ciclos de cuatro años de Bitcoin
Para comprender por qué esta afirmación representa un cambio de paradigma, es necesario recordar cómo surgieron los ciclos de cuatro años de Bitcoin. Estos ciclos se construían alrededor del halving, evento programado en el código de Bitcoin que reduce a la mitad la recompensa que reciben los mineros por validar transacciones.
Históricamente, cada halving (2012, 2016, 2020) ha sido seguido por una corrida alcista:
- Post-halving 2012: Bitcoin pasó de $12 a más de $1.100 en un año.
- Post-halving 2016: Subió de $650 a cerca de $20.000 en 2017.
- Post-halving 2020: Alcanzó su máximo histórico de casi $69.000 en 2021.
Estas tendencias consolidaron la creencia en un patrón repetitivo que guiaba la inversión. Sin embargo, tras el último halving en abril de 2024, el comportamiento del mercado ha sido diferente.
El halving de 2024 ya pasó… y Bitcoin superó los $120.000 en 2025
Lejos de seguir el patrón clásico con una subida moderada post-halving, Bitcoin rompió todas las expectativas en julio de 2025, alcanzando un nuevo máximo histórico por encima de $120.000.
Pero según Hougan, este nuevo récord no obedece a los factores clásicos de los ciclos pasados. No fue el halving el que generó el movimiento, sino una serie de nuevas fuerzas estructurales que están redefiniendo el comportamiento del mercado.
Why is the four-year cycle dead?
— Matt Hougan (@Matt_Hougan) July 25, 2025
1) The forces that have created prior four-year cycles are weaker:
i) The halving is half as important every four years;
ii) The interest rate cycle is positive for crypto, not negative (as it was in 2018 and 2022);
iii) Blow-up risk is… https://t.co/F9ybjHEeB5
La institucionalización ha alterado el juego
Compras constantes en lugar de shocks de demanda
Uno de los principales argumentos de Hougan es que los shocks de demanda que antes generaba el halving han perdido relevancia. Hoy, la adopción institucional y corporativa mantiene una demanda constante que reduce la volatilidad histórica.
Empresas como BlackRock, MicroStrategy, Tesla, y fondos como Fidelity y Franklin Templeton han intensificado sus compras de BTC, ya sea directamente o a través de ETFs, generando un flujo estable de capital.
ETFs de Bitcoin: el verdadero motor del nuevo ciclo
Según Hougan, los próximos 5 a 10 años estarán marcados por la expansión continua de los ETFs de Bitcoin al contado. Desde su aprobación en enero de 2024, estos instrumentos han captado decenas de miles de millones de dólares, impulsando el precio sin necesidad de depender de los halvings.
En 2025, los ETFs no solo se consolidaron en EE.UU., sino que también comenzaron a ser aprobados en otras regiones como Hong Kong, Australia y Alemania, lo cual ha ampliado la base de compradores institucionales.
Regulación y respaldo legal: cimientos de la nueva era
Hougan también destaca que la regulación ha dejado de ser un obstáculo y se ha convertido en un motor de crecimiento. La reciente aprobación de normativas como la Ley GENIUS ha brindado certeza jurídica y ha abierto la puerta a nuevos actores financieros tradicionales.
“Esta legislación está ayudando a atraer a Wall Street. Veremos miles de millones de dólares más entrar al ecosistema en los próximos años”, afirmó Hougan.
TE PUEDE INTERESAR: MARA Holdings busca expandir su dominio en Bitcoin con una ambiciosa recaudación de $850 millones
Cambio en la correlación con las tasas de interés
Otra transformación importante es la relación entre Bitcoin y la política monetaria. En ciclos anteriores, los aumentos en las tasas de interés por parte de la Reserva Federal provocaban caídas en el precio de BTC. Sin embargo, desde finales de 2023 y durante 2024–2025, la correlación se volvió positiva.
Es decir, Bitcoin ha empezado a comportarse como un activo refugio digital con sensibilidad macroeconómica, lo que sugiere su integración en portafolios institucionales que también incluyen oro, acciones y bonos.
¿Qué esperar para 2026?
Tradicionalmente, el año posterior al halving era el momento de máximos. Pero en este ciclo, Bitcoin ya alcanzó su ATH en 2025, lo cual rompe con el patrón clásico.
Hougan señala que, aunque 2026 aún podría ser un año favorable, el mercado ya ha descontado gran parte de ese potencial. Más que una explosión especulativa, él prevé una fase de crecimiento más estable y menos dependiente de la narrativa cíclica.
“Todo esto sugiere que las fuerzas estructurales del mercado cripto ya han superado a los factores clásicos del ciclo cuatrienal. El 2026 aún será importante, pero 2025 demostró que el viejo patrón ya no aplica. Creo que veremos más un auge sostenido que un superciclo”, afirmó Hougan.
Riesgo emergente: las tesorerías corporativas en Bitcoin
Un aspecto que Hougan invita a vigilar es el auge de las tesorerías corporativas en BTC. Empresas que acumulan grandes cantidades de Bitcoin en sus balances podrían convertirse en fuentes de riesgo sistémico si deciden liquidar posiciones rápidamente.
Una venta masiva por razones fiscales, regulatorias o estratégicas —como ocurrió en parte con Tesla en 2023— podría desencadenar correcciones abruptas.
¿El fin de los ciclos… o la evolución del mercado?
Aunque algunos maximalistas aún creen en el patrón del halving como catalizador dominante, la realidad actual demuestra que el mercado ha madurado.
Los inversores ya no deben basarse exclusivamente en modelos históricos. La combinación de ETFs, regulación, institucionalización y adopción global está creando un nuevo tipo de mercado: más robusto, más global y más impredecible.
TE PUEDE INTERESAR: SpaceX sorprende al mover $153 millones en Bitcoin por primera vez en tres años
Conclusión
El ciclo de cuatro años de Bitcoin, que sirvió durante mucho tiempo como brújula para los inversores, parece haber perdido relevancia. El máximo histórico alcanzado en julio de 2025 por encima de $120.000, apenas un año después del halving, es la mayor prueba de que las reglas del juego han cambiado.
Estamos ante una nueva etapa: menos dependiente del código y más guiada por las fuerzas del mercado global. Tal vez no sea el fin de los ciclos, pero sí el inicio de una era más madura, profesionalizada y sostenida para Bitcoin.