Los usuarios de Litecoin sufrieron un ataque de polvo a gran escala, informó Binance ayer 10 de agosto.
Un ataque de polvo es un nuevo tipo de actividad maliciosa en la que los estafadores y los piratas informáticos intentan romper la privacidad de los usuarios de criptomonedas enviando pequeñas cantidades de monedas a sus billeteras personales.
Los atacantes rastrean la actividad de transacción de estas billeteras realizando un análisis combinado de varias direcciones para identificar al individuo o la empresa detrás de cada billetera.
Una de las muchas transacciones afectadas compartidas por Binance es, https://chainz.cryptoid.info/ltc/tx.dws?36359475.htm
El polvo es una pequeña cantidad de monedas o tokens, tan pequeño que la mayoría de los usuarios ni siquiera lo notan, como 1 satoshi (0.00000001 BTC) en el caso de Bitcoin.
Cuídese de un ataque de polvo
Binance explica que, dentro de los intercambios de criptomonedas, el polvo también son las pequeñas cantidades de monedas que se “atascan” en la cuenta de los usuarios después de ejecutar las órdenes comerciales. Estas cantidades realmente pequeñas de monedas no son intercambiables, pero los usuarios de Binance pueden convertirlas a BNB.
Como los usuarios de las criptomonedas no prestan mucha atención a estas pequeñas cantidades, los estafadores comenzaron a “desempolvar” una gran cantidad de direcciones enviándoles algunos satoshis. Después de desempolvar varias direcciones, los estafadores analizan varias direcciones para identificar cuáles pertenecen a la misma billetera.
Primero comenzó con Bitcoin, pero, estos ataques ahora también están ocurriendo con otras criptomonedas.
Como pensamiento final, Binance dijo que si bien la cadena de bloques de Bitcoin es casi imposible de hackear, las billeteras “presentan un importante punto de preocupación”.
“Cuando un usuario guarda sus criptomonedas en una billetera personal, está actuando como su propio banco, lo que significa que no hay nada que pueda hacer en caso de que sea pirateado o pierda sus claves privadas”.
