Starbucks ha lanzado una nueva iniciativa para la trazabilidad de sus productos en blockchain gracias a Microsoft.
Así lo revela Bloomberg, al explicar que desde ayer los clientes de la famosa cadena de cafeterías de Estados Unidos podrán usar un código en las bolsas de café para saber de dónde provienen los granos y dónde fueron tostados, como así como recibir asesoramiento sobre su preparación.
De la misma forma, la empresa proporciona un código a los agricultores para que puedan monitorear sus productos.
En particular, hasta ahora los agricultores no podían saber en qué mezclas se utilizaban sus productos, por ejemplo, mientras que con este nuevo sistema sí podrán saberlo.
La vicepresidenta global de café, té y cacao de Starbucks, Michelle Burns, dijo:
“Hemos podido rastrear cada café que compramos de cada finca durante casi dos décadas. Eso nos permitió tener la base para construir ahora una herramienta fácil de usar e impulsada por el consumidor que ciertamente brinda esa confianza y seguridad a nuestros clientes de que sabemos de dónde proviene todo nuestro café”.
La nueva herramienta ha sido desarrollada en colaboración con Microsoft, pero los detalles técnicos sobre su funcionamiento aún no están disponibles.
Sin embargo, es concebible que se base en un DLT no descentralizado, es decir, no en una cadena de bloques real.
El objetivo es elevar el nivel de confianza de los consumidores, especialmente los consumidores más jóvenes y más conscientes de la sustentabilidad, quizás debido a la competencia que está sufriendo la empresa de las pequeñas cafeterías artesanales donde el café se tuesta directamente en la parte trasera de la propia tienda.
Parece que los millennials están cada vez más interesados en saber de dónde provienen los alimentos que consumen, cómo se cultivaron y si se produjeron de manera sostenible y ética, y esto de hecho obliga a empresas aún más grandes que producen o comercializan alimentos y materias primas agrícolas para ser más transparentes sobre sus cadenas de suministro.
La relación entre DLT y la cadena de suministro está en observación desde hace algún tiempo, ya que DLT puede ofrecer una garantía de incorruptibilidad y origen de los datos mostrados a los consumidores, obligando a las empresas a asumir la plena responsabilidad de lo que declaran.
En realidad, Starbucks no es el único actor del sector cafetero que se ha orientado hacia soluciones similares
Seguramente el hábito de rastrear la cadena de suministro del café durante décadas ha ayudado a la empresa a resolver los muchos problemas que una iniciativa similar genera inevitablemente a nivel técnico, por lo que no siempre es posible rastrear la información hasta el productor individual.
En particular, para algunas bolsas, como las que contienen mezclas, solo se indicarán los países de origen, en otras las regiones de cultivo o la comunidad que entregó los granos de café a una determinada estación de lavado, mientras que en otras se podrá indicar el agricultor que los produjo, en el caso de envases de origen único, por ejemplo.