A las pocas semanas de su anuncio, el proyecto de Ripple para tokenizar algunas tierras expropiadas por el gobierno colombiano a la delincuencia parece estar enfrentando dificultades inesperadas.
La tokenización de algunas tierras colombianas parece haberse estancado
El proyecto que había lanzado Ripple Labs en colaboración con las autoridades colombianas para registrar vía blockchain algunas porciones de tierra confiscadas a la delincuencia por el gobierno corre grave peligro de no materializarse.
El proyecto, que había sido lanzado a fines de julio por el gobierno colombiano en asociación con el desarrollador de blockchain Peersyst Technology y Ripple Labs, consistía en almacenar y autenticar títulos de propiedad de forma permanente en XRPL, la blockchain pública de Ripple.
De acuerdo con las intenciones del gobierno colombiano, este sistema habría hecho menos burocrática y más equitativa la distribución de grandes propiedades pertenecientes a los grandes carteles de la droga de Colombia.
Pero solo unas semanas después del anuncio, las primeras opiniones contrarias comenzaron a surgir de las autoridades colombianas. El titular interino de la Agencia de Tierras de Colombia dijo hace dos días que el proyecto no es una prioridad para 2022 y no sería considerado una prioridad estratégica para el departamento de tecnología de la información del país.
La noticia fue una gran sorpresa, considerando cómo se considera que el nuevo presidente de Colombia, Gustavo Petro, es criptoamigable, lo que también se refleja en algunos de sus tuits recientes a favor de las criptomonedas:
¿Cuál era el objetivo del proyecto de Ripple Labs en Colombia?
El proyecto de Ripple Labs tenía como objetivo la redistribución justa y segura de la tierra, que, según un acuerdo de paz firmado conjuntamente por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia y el gobierno colombiano en 2016, consistía en redistribuir la tierra a las comunidades indígenas marginadas.
Ferran Prat, CEO de Peersyst Technology, dijo:
“El punto es que la tierra es importante en Colombia, por lo que se necesita un sistema que asegure que la tierra no pueda ser tomada indebidamente”, agregó. “Poner la información en una cadena de bloques pública que no se puede cambiar o alterar ayudará”.
Antony Welfare, asesor principal de Ripple Labs, agregó:
“Con la cadena de bloques pública, una vez que se registra la transacción, nunca se puede eliminar. Esa es la parte más importante. Si el sistema de gobierno explota, el propietario de la tierra seguirá estando en una cadena de bloques porque se mantiene en diferentes nodos en todo el mundo”.
Ahora, sin embargo, el proyecto parece estar encontrando dificultades relacionadas precisamente con la nueva administración, ya que el acuerdo se firmó antes de la juramentación del nuevo presidente. La nueva administración parece mucho menos convencida de los méritos del proyecto y, según algunos expertos, podría estar políticamente muerto.
El plan del presidente Petro incluiría la compra por parte del Estado de parte de las tierras actualmente en desuso o utilizadas con fines ilegales y su redistribución a los campesinos, sin, sin embargo, dar prioridad a los pueblos indígenas y las comunidades rurales, ya que, por otro lado, la antigua administración quiso hacerlo de la manera más equitativa y segura posible precisamente al decidir usar la cadena de bloques pública de Ripple.
