La conversación sobre cripto-terror está de vuelta.
Atrás quedaron los días en que las personas se burlaban de Bitcoin y otros activos digitales como una herramienta para lavadores de dinero, terroristas y delincuentes en todo el mundo. Desde ser pedaleado en los oscuros atractivos de Internet hasta ser abrazado por gigantes financieros como Intercontinental Exchange, Fidelity y TD Ameritrade, las criptomonedas han recorrido un largo camino.
Sin embargo, esta reputación podría verse sofocada si el propósito de las criptomonedas se mueve de controlar las finanzas de uno para permitir que los agentes desviados muevan el dinero. Como lo aludió el Ministro de Asuntos Interiores de Australia, Peter Dutton, el uso de criptomonedas en actividades terroristas está vivo y bien.
Hablando en una conferencia contra el terrorismo en Melbourne el 7 de noviembre, el Ministro declaró que la naturaleza anónima de la moneda digital permite a los usuarios nefastos pasar desapercibidos, y este es un problema real para las autoridades.
“El anonimato que brindan estas tecnologías permite a los financieros del terrorismo ofuscar sus actividades”.
Con el desarrollo de las monedas digitales, que se infiltra en todos los canales de las principales finanzas, su uso en actividades delictivas solo aumenta. Afirmó que las criptomonedas se están implementando en “tarjetas de valor almacenado, sistemas de pago en línea y plataformas de financiación colectiva”, y esto está permitiendo nuevos “canales” de financiación para terroristas.
Los países deben tener en cuenta los medios modernos y tradicionales de financiación del terrorismo y estar a la vanguardia en ambos frentes, aconsejó Dutton. En este esfuerzo, se señaló la necesidad de que el australiano gobierno para trabajar con ambas instituciones bancarias privadas nacionales y gobiernos extranjeros para hacer frente a esta amenaza real.
Añadió que los canales de financiación populares, que a menudo pasan desapercibidos, como organizaciones benéficas y organizaciones sin fines de lucro, también deben analizarse con bastante atención.
“En muchos casos, las organizaciones sin fines de lucro ni siquiera son conscientes de que se están aprovechando de ellas”.
Australia aumenta cada vez más su control sobre el sector de activos digitales en desarrollo. A principios de esta semana, los reguladores del país comenzaron a presionar al gigante de las redes sociales Facebook para investigar más a fondo sobre su moneda digital, Libra.
Reuters informó el 6 de noviembre que ocho reguladores de Australia decidieron usar sus “poderes formales” para revelar más información sobre Libra, luego de una “reunión insatisfactoria” con Facebook el mes pasado. Elizabeth Hampton, comisionada adjunta de la Oficina del Comisionado de Información de Australia (OAIC), el regulador nacional de privacidad e información, declaró:
” Si no obtenemos respuestas a estas preguntas del equipo con sede en los EE. UU., Tendremos que considerar si se ejercen poderes formales donde estén disponibles”.
Otros legisladores han declarado que Libra podría usarse para financiar actividades terroristas, con un político estadounidense comparando el uso de la moneda digital de Facebook para “enviar una solicitud de amistad a terroristas”. Brad Sherman, congresistas estadounidenses de California y un crítico vocal de las criptomonedas, en un tuit declaró que Libra o el “Zuck Buck”, compite por “derrotar” las leyes antilavado de dinero de la nación.