Anteriormente, Criptoinforme informó que había esperanza de que se tomarían decisiones clave sobre el lavado de dinero en las reuniones del G20 que se celebran actualmente en Fukuoka, Japón. Sin embargo, ahora se ha emitido una declaración conjunta que ofrece poco en el camino para un mayor desarrollo de políticas, y en su lugar hace un llamado general a “permanecer vigilantes”.
Declaración del G20
La declaración se publicó el 9 de junio y abarca una amplia gama de observaciones y decisiones tomadas por los miembros de la cumbre del G20. El de interés para nosotros se encuentra en #13:
“Las innovaciones tecnológicas, incluidos las criptomonedas subyacentes, pueden brindar importantes beneficios al sistema financiero y a la economía en general. Si bien las criptomonedas no representan una amenaza para la estabilidad financiera mundial en este punto, seguimos atentos a los riesgos, incluidos los relacionados a la protección del consumidor e inversionista, el lavado de dinero (AML) y la lucha contra la financiación del terrorismo (CFT). Reafirmamos nuestro compromiso de aplicar los Estándares del GAFI recientemente modificados a los activos virtuales y proveedores relacionados para el AML y el CFT. Esperamos con interés la Adopción de la Nota Interpretativa y Guía del GAFI por parte del GAFI en su sesión plenaria a finales de este mes.
Acogemos con beneplácito el trabajo de IOSCO en plataformas de comercio de criptomonedas relacionadas con la protección de los consumidores e inversores y la integridad del mercado. Damos la bienvenida al directorio de reguladores de activos criptográficos del FSB, y su informe sobre el trabajo en curso, los enfoques regulatorios y las posibles brechas relacionadas con las criptomonedas. Pedimos al FSB y a los organismos de establecimiento de normas que supervisen los riesgos y consideren el trabajo en respuestas multilaterales adicionales según sea necesario. También acogemos con beneplácito el informe del FSB sobre tecnologías financieras descentralizadas y las posibles implicaciones para la estabilidad financiera, la regulación y la gobernanza, y cómo los reguladores pueden mejorar el diálogo con un grupo más amplio de partes interesadas. También continuamos intensificando los esfuerzos para mejorar la resiliencia cibernética, y celebramos los avances en la iniciativa del FSB para identificar prácticas efectivas para responder y recuperarse de incidentes cibernéticos”.
Conclusión
La declaración es bastante larga, pero en general dice que en la actualidad no consideran que las criptomonedas sea una amenaza para el sistema financiero mundial y agradecen las diversas formas de monitoreo que realizan las organizaciones de todo el mundo. No se proporciona claridad significativa, lo que probablemente es decepcionante para algunos.