La reciente Encuesta sobre Economía y Toma de Decisiones de los Hogares (SHED) de la Reserva Federal ha revelado datos sorprendentes sobre la relación de los estadounidenses con las criptomonedas en 2023. Según los hallazgos, aproximadamente 18 millones de personas en Estados Unidos informaron haber usado o poseído criptomonedas durante el año. Este artículo analiza en profundidad los resultados de la encuesta, examina las tendencias y comportamientos de los usuarios de criptomonedas y ofrece una visión detallada del panorama actual de las criptomonedas en el país.
Resultados clave de la encuesta de la Fed
A pesar del entusiasmo inicial por las criptomonedas en años anteriores, la encuesta de la Fed muestra una tendencia a la baja en su uso. En 2023, solo el 7% de los adultos estadounidenses reportaron haber interactuado con criptomonedas en los 12 meses previos a octubre. Esto representa una caída significativa en comparación con años anteriores, donde se registraron descensos del 10% en 2022 y del 12% en 2021.
Un dato notable es la disminución en el uso de criptomonedas para pagos o transferencias de dinero. Solo el 1% de los encuestados utilizó criptomonedas para estos fines, lo cual es la mitad de lo registrado en 2022. La preferencia del receptor fue citada como la razón principal para realizar pagos con criptomonedas por aproximadamente un tercio de los encuestados.
A pesar de la disminución en el uso para transacciones, el 7% de los adultos encuestados compraron o almacenaron criptomonedas como una inversión. Esto sugiere que, aunque su uso práctico haya disminuido, las criptomonedas aún se ven como una opción viable para inversión a largo plazo.
Demografía de los usuarios de criptomonedas
La encuesta revela que los millennials (entre 30 y 44 años) y los adultos de la Generación Z (entre 18 y 29 años) son los grupos demográficos más propensos a usar criptomonedas. Este hallazgo es consistente con la tendencia de que las generaciones más jóvenes son más abiertas a adoptar nuevas tecnologías financieras.
Otra observación importante es la disparidad de género en el uso de criptomonedas. Los hombres tienen tres veces más probabilidades de usar criptomonedas que las mujeres. Esta brecha de género en el uso de criptomonedas podría ser un área clave para futuros estudios y políticas de inclusión financiera.
El ingreso anual también juega un papel significativo en la adopción de criptomonedas. Un mayor porcentaje de personas con ingresos anuales de $100.000 o más reportaron usar criptomonedas en comparación con aquellos con ingresos más bajos. Esto puede deberse a una mayor capacidad de asumir riesgos financieros y a un mayor acceso a recursos educativos sobre inversiones.
Comparación con otros estudios
Es interesante notar que los hallazgos de la Fed contrastan fuertemente con las afirmaciones de Coinbase, que sugieren que 52 millones de estadounidenses poseen criptomonedas. Esta discrepancia podría deberse a diferencias en las metodologías de encuesta o a la definición de lo que significa “poseer” criptomonedas.
A pesar de que la pérdida de confianza en las instituciones financieras fue la causa menos mencionada para el uso de criptomonedas, es un factor que podría ganar importancia en el futuro. Con eventos recientes que han sacudido la confianza en los sistemas financieros tradicionales, más personas podrían volverse hacia las criptomonedas como una alternativa viable.
La persistencia del uso de criptomonedas como inversión sugiere un área de crecimiento potencial. A medida que más plataformas educativas y de inversión se vuelven accesibles, más individuos podrían estar dispuestos a explorar las criptomonedas como una parte de su cartera de inversiones.
Las disparidades de género y de ingresos en el uso de criptomonedas indican una necesidad de políticas y programas que promuevan la inclusión financiera. Abordar estos desequilibrios podría no solo ampliar la adopción de criptomonedas, sino también fomentar una mayor equidad financiera en general.