El mercado de las criptomonedas podría estar a las puertas de un nuevo ciclo alcista. En medio de la incertidumbre global, los datos más recientes sobre la inflación en Estados Unidos y el alivio de las tensiones comerciales con China han devuelto el optimismo a los inversionistas. El precio de Bitcoin, la criptomoneda más importante del mercado, superó los $110.000 luego de que el índice de precios al consumidor (IPC) de mayo resultara más bajo de lo esperado, al mismo tiempo que se anunciaba un nuevo acuerdo arancelario entre EE.UU. y China.
Con este nuevo escenario económico, analistas como Nic Puckrin, fundador de The Coin Bureau, anticipan que Bitcoin podría continuar su rally, impulsado por un entorno de menor inflación, reducción de riesgos geopolíticos y posibles recortes en las tasas de interés por parte de la Reserva Federal.
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Inflación en Estados Unidos: ¿Un respiro para los mercados?
El índice de precios al consumidor (IPC) publicado por el Departamento de Trabajo de EE.UU. mostró un aumento interanual del 2,4% en mayo, apenas por encima del 2,3% de abril, pero por debajo del pronóstico del 2,5% esperado por los economistas. A nivel mensual, el aumento fue de apenas 0,1%, una cifra que muchos expertos consideran moderada.
Aunque la inflación sigue por encima del objetivo del 2% establecido por la Reserva Federal, la desaceleración respecto a las expectativas del mercado fue bien recibida por los inversionistas. En particular, el mercado de activos de riesgo como Bitcoin reaccionó con fuerza, registrando una subida inmediata que lo llevó a cotizarse brevemente por encima de los $110.300, según datos de TradingView.
El factor arancelario: un alivio para los activos de riesgo
Otro componente clave en este cambio de tono positivo fue el anuncio del expresidente Donald Trump sobre un nuevo acuerdo comercial con China, que estipula aranceles del 55% para EE.UU. y 10% para China. Si bien las cifras pueden parecer elevadas, lo más relevante es que representan un punto de inflexión frente al temor generalizado que existía sobre una escalada comercial agresiva entre ambas potencias.
Para Nic Puckrin, este anuncio disipa una de las principales fuentes de volatilidad del año:
“Los aranceles que causaron tanto pánico en el mercado a principios de este año han sido suavizados casi por completo. Una vez que EE.UU. y China firmen el acuerdo —que ya han finalizado— estaremos, en esencia, de vuelta al statu quo”, comentó el analista.
¿Por qué este entorno favorece a Bitcoin?
La palabra clave es confianza. La combinación de una inflación moderada, una política comercial más estable y la posibilidad de que la Reserva Federal recorte las tasas de interés crea un entorno ideal para los activos de riesgo como Bitcoin. Esto se debe a varios factores:
Menor inflación = mayor poder adquisitivo
Con una inflación más controlada, los consumidores conservan mayor poder de compra, lo que puede traducirse en una mayor inversión en criptomonedas.
Política monetaria más flexible
Si la Fed recorta las tasas, el costo de oportunidad de mantener activos como Bitcoin disminuye, haciéndolos más atractivos frente a los bonos del Tesoro u otros instrumentos tradicionales.
Reducción de tensiones geopolíticas
La incertidumbre sobre los aranceles y la guerra comercial entre EE.UU. y China había sido un gran lastre para los mercados. La resolución parcial de este conflicto devuelve la estabilidad y alienta a los inversores a asumir más riesgos.
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Factores deflacionarios que pueden reforzar el rally de Bitcoin
Además de los factores macroeconómicos, Puckrin identificó dos elementos clave que podrían profundizar la tendencia bajista en la inflación y, por ende, reforzar el ciclo alcista de Bitcoin:
Exceso de inventario en el comercio minorista
Durante el primer semestre del año, muchas empresas minoristas realizaron compras masivas ante la expectativa de un entorno inflacionario y arancelario más agresivo. Sin embargo, con la moderación en los precios y la flexibilización comercial, ahora están obligadas a liquidar el exceso de inventario a precios más bajos, lo que empuja aún más a la baja la inflación.
Caída de los precios de la vivienda
Los costos de vivienda representan aproximadamente un tercio del IPC. Según Puckrin, las políticas migratorias de Trump podrían reducir la demanda de viviendas, lo que a su vez presionaría a la baja los alquileres y precios inmobiliarios. Esta caída sería un factor adicional para la reducción de la inflación general.
El ciclo alcista de Bitcoin podría reactivarse pronto
A medida que la economía da señales de estabilidad y la inflación no se dispara como muchos temían, Bitcoin se perfila como uno de los principales beneficiarios de este nuevo entorno macroeconómico. El analista es optimista:
“A pesar de la cautela persistente de los consumidores, espero que la inflación siga una tendencia descendente durante el año, lo que también daría a la Fed la confianza para recortar finalmente las tasas nuevamente. Y esto es lo que impulsará a Bitcoin en la etapa final de su rally en este ciclo y, con suerte, finalmente traerá de vuelta a los inversionistas minoristas al mercado cripto.”
¿Qué esperar de la Fed?
La Reserva Federal tiene programada su próxima reunión para la próxima semana, donde se espera que mantenga las tasas de interés sin cambios hasta al menos septiembre, según las encuestas más recientes de Reuters. Sin embargo, si la tendencia de moderación inflacionaria continúa, no se descarta que haya recortes en los tipos de interés antes de que finalice el año.
Este contexto puede ser un catalizador fundamental para Bitcoin, que históricamente ha mostrado fuertes reacciones ante decisiones de política monetaria expansiva.
Bitcoin y la narrativa macroeconómica: una nueva oportunidad para el inversionista minorista
El ciclo actual de Bitcoin se ha visto marcado por una alta participación institucional, especialmente tras la aprobación de los ETF de Bitcoin al contado. No obstante, muchos inversores minoristas aún no han regresado en masa al mercado cripto.
Una reactivación del rally, impulsada por condiciones macroeconómicas más favorables, podría ser el desencadenante que atraiga nuevamente al público general, impulsando aún más el precio de Bitcoin hacia nuevos máximos históricos.
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Conclusión: ¿Estamos al borde del próximo gran rally de Bitcoin?
El escenario actual sugiere que sí. Con una inflación más baja de lo esperado, la relajación de las tensiones arancelarias entre Estados Unidos y China, y la posibilidad real de un recorte de tasas por parte de la Fed, Bitcoin se encuentra bien posicionado para retomar su tendencia alcista.
A medida que se disipan los riesgos y los fundamentos se fortalecen, la confianza en los activos de riesgo crece, y Bitcoin —como líder indiscutible del mercado cripto— podría ser el principal beneficiado de este nuevo panorama.
El mercado ahora se enfoca en la decisión de la Reserva Federal la próxima semana, que podría marcar el rumbo definitivo del segundo semestre del año. Si se confirman más señales de una política monetaria laxa, Bitcoin podría alcanzar nuevos máximos en 2025, consolidando aún más su papel como reserva digital de valor.
