En un movimiento que marca un nuevo capítulo en la evolución cripto de Estados Unidos, Arizona ha revivido y aprobado en el Senado un ambicioso proyecto de ley que propone la creación de un Fondo de Reserva de Bitcoin y Activos Digitales. Esta medida no solo refuerza el papel del estado en la integración de activos digitales en las finanzas públicas, sino que lo posiciona como pionero en la adopción institucional de criptomonedas.
Con este paso, Arizona consolida su lugar como uno de los estados más activos en materia legislativa cripto, destacándose por impulsar políticas públicas innovadoras en torno a los activos digitales. Pero, ¿qué implica realmente este proyecto de ley para el futuro del ecosistema cripto en el estado?
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¿Qué es el proyecto de ley HB2324 aprobado por el Senado de Arizona?
El proyecto de ley HB2324, recientemente aprobado por el Senado de Arizona con una votación estrecha de 16 a 14, busca establecer un Fondo de Reserva de Bitcoin y Activos Digitales bajo la administración del tesorero estatal. Este fondo se encargaría de gestionar los activos digitales incautados mediante decomisos relacionados con delitos.
La legislación contempla tres vías para el tratamiento de estos activos digitales:
- Almacenamiento seguro en billeteras digitales aprobadas por el estado.
- Venta en exchanges de criptomonedas licenciados.
- Retención en su forma nativa, dependiendo de criterios de mercado y seguridad.
Pero la propuesta va más allá del simple manejo de criptoactivos. Introduce también reformas legales para incluir los activos digitales en el marco de las leyes de decomiso de bienes del estado, y propone nuevos estándares de custodia modernos, con énfasis en el uso de tecnología blockchain y custodios terceros calificados.
¿Cómo se distribuirán los fondos obtenidos de los activos digitales?
El texto de la ley también establece cómo se utilizarán los recursos económicos derivados de la venta de estos activos digitales. La distribución propuesta es la siguiente:
- Los primeros $300.000 recaudados irán directamente a la Oficina del Fiscal General.
- El excedente se dividirá así:
- 50% para la Oficina del Fiscal General.
- 25% al fondo general del estado.
- 25% al nuevo Fondo de Reserva de Bitcoin y Activos Digitales.
Además, se contempla la posibilidad de invertir los fondos acumulados en criptomonedas o ETFs cripto, lo que permitiría generar ganancias adicionales que serían retornadas al estado de Arizona.
¿Por qué Arizona está apostando por las reservas en Bitcoin?
Arizona ha sido históricamente un estado receptivo a la innovación tecnológica, y en los últimos años ha mostrado una actitud favorable hacia la adopción de tecnologías blockchain y criptomonedas en sus políticas públicas.
El impulso por parte del poder legislativo se ha mantenido, a pesar de que la gobernadora Katie Hobbs ha vetado varias propuestas cripto en el pasado reciente. Sin embargo, la aprobación de proyectos como HB2324 demuestra que la presión por avanzar en la materia persiste desde el Congreso estatal.
Un camino lleno de obstáculos: vetos anteriores y resistencia política
Aunque Arizona ha dado pasos significativos, el camino hacia una integración plena de las criptomonedas en su estructura institucional no ha estado libre de controversias. La gobernadora Katie Hobbs ha vetado en los últimos meses varias iniciativas clave:
- SB1025: Habría permitido que funcionarios estatales invirtieran hasta el 10% de los fondos del tesoro y pensiones en Bitcoin y otros activos digitales.
- SB1373: Proponía la creación de un Fondo Estratégico de Activos Digitales.
- SB1024: Permitía a agencias estatales aceptar pagos en criptomonedas para impuestos, tarifas, multas y otros conceptos.
Pese a estos vetos, Hobbs firmó la HB2749 el pasado 7 de mayo, convirtiéndola en la primera ley sobre reservas en Bitcoin aprobada formalmente en Arizona. Este precedente ha sido clave para la revivificación del nuevo proyecto de ley HB2324.
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¿Qué diferencia al proyecto HB2324 de leyes cripto anteriores?
Mientras otras leyes cripto han buscado integrar los activos digitales al funcionamiento diario del estado —como el pago de impuestos o la inversión en pensiones—, el proyecto HB2324 está enfocado exclusivamente en activos incautados por delitos.
Esto lo convierte en una propuesta más fácil de aceptar políticamente, ya que:
- No implica que el estado compre directamente criptomonedas.
- No representa una especulación con fondos públicos.
- Introduce una estructura legal y segura para la custodia de activos digitales que ya están en posesión del estado por procedimientos judiciales.
Además, el proyecto establece lineamientos claros de uso, almacenamiento y monetización de estos activos, lo que brinda mayor transparencia y seguridad jurídica.
Arizona busca liderazgo cripto frente a otros estados de EE.UU.
Con esta nueva legislación, Arizona se une a un reducido pero creciente grupo de estados que están considerando la adopción de Bitcoin y activos digitales como parte de su economía estatal. Otros ejemplos notables incluyen:
- Texas, donde se ha promovido activamente la minería de Bitcoin.
- Wyoming, conocido por su marco legal amigable para empresas cripto.
- Florida, donde se han explorado pagos en criptomonedas a empleados estatales.
Sin embargo, el enfoque de Arizona es único: no busca necesariamente adoptar Bitcoin como moneda, sino crear una infraestructura legal y financiera basada en la administración eficiente de activos digitales ya incautados.
¿Qué sigue ahora para el proyecto de ley en Arizona?
Luego de haber sido aprobado en el Senado, el proyecto HB2324 regresa ahora a la Cámara de Representantes para una votación final. Si logra la aprobación, será enviado a la gobernadora Katie Hobbs para su firma.
A juzgar por sus decisiones anteriores, no es seguro que Hobbs lo firme, aunque la naturaleza de esta ley —centrada en la administración de activos ya en poder del estado— podría hacerla más aceptable políticamente.
Implicaciones a largo plazo: ¿puede Arizona marcar tendencia nacional?
De aprobarse, el proyecto HB2324 no solo consolidará a Arizona como líder en legislación cripto a nivel estatal, sino que también podría:
- Establecer un precedente para otros estados con situaciones similares de activos incautados.
- Sentar las bases para la inversión institucional en criptomonedas, comenzando por fondos de decomisos.
- Impulsar mayor claridad regulatoria en torno a la custodia y administración de activos digitales en el sector público.
Esto tendría implicaciones incluso a nivel federal, donde el debate sobre la regulación de criptomonedas sigue en curso y los estados están empezando a marcar la pauta con sus propias iniciativas.
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Conclusión: ¿se consolidará Arizona como referente cripto en EE.UU.?
Aunque aún queda un último paso legislativo y la decisión final de la gobernadora Hobbs, la aprobación del proyecto HB2324 en el Senado representa una señal clara de que Arizona está comprometido con una infraestructura estatal moderna y adaptada a los nuevos tiempos digitales.
En un entorno donde la regulación cripto sigue siendo difusa en muchas jurisdicciones, la claridad y firmeza de Arizona podrían convertir al estado en un faro para otras legislaciones en los Estados Unidos.
Todo dependerá de si la Cámara ratifica la medida y si la gobernadora decide permitir que este fondo de reservas digitales vea la luz. Pero una cosa es clara: Arizona está decidida a no quedarse atrás en la revolución cripto.
