A 31 de marzo la revalorización del Bitcoin, la principal criptomoneda por capitalización de mercado es del 67% y ofrece una subida del 147% en los últimos doce meses. Cotiza algo por encima de los 70.000 dólares, pero ya ha marcado en estas últimas semanas precios en torno a los 73.700 dólares.
La revalorización del bitcoin ha hecho que el trading con esta criptomoneda haya sido positivo los últimos meses. Por ese motivo, vamos a analizar los motores de estas alzas y cuáles pueden ser los motores de lo que pueda ocurrir a partir de ahora.
Si hablamos de los impulsores del bitcoin en los últimos meses, está claro que tenemos que hablar de la aprobación el pasado mes de enero de los diez ETFs sobre el precio al contado de esta criptodivisa. Esta noticia ha animado el trade y a los inversores. Sólo el fondo cotizado (ETF) de bitcoin de la firma estadounidense BlackRock se fue hasta los 10.000 millones de dólares, mucho más rápido que cualquier otro ETF estadounidense en toda la historia, según el diario británico Financial Times.
Al observar cómo se han ido adoptando las innovaciones tecnológicas a lo largo del tiempo, vemos que todas siguen los mismos patrones: desde los primeros adoptantes hasta la adopción masiva. Algo que también se percibe en el trading.
Con el tiempo, las innovaciones tienden a adoptarse más rápido. Internet vivió un proceso de adopción muy rápido, y pasó de menos de 10 millones de usuarios en 1992 a 1.000 millones en 2005 (13 años). Bitcoin pasó ya del millón de usuarios en 2016 a los 350 millones en 2021. La cifra de los mil millones de usuarios podría alcanzarse en 2025, solo nueve años después.
Esta velocidad de adopción es una fuente de demanda adicional que podría poner presión sobre una oferta ya limitada. No en vano, en el momento del cuarto halving, ya se habrá emitido el 96,9% de todos los bitcoins posibles. De ahí el interés qe ha despertado para el trading las últimas semanas.
En Europa, los productos cotizados en bolsa (ETPs) de criptomonedas con respaldo físico llevan años en el mercado. Con el lanzamiento de los fondos cotizados en bolsa (ETFs) de bitcoin al contado en EE.UU., los instrumentos para la inversión en criptodivisas regulados ya están disponibles en la mayoría de los países y los debates en torno a la inclusión de criptodivisas en las carteras han pasado del “¿por qué?” al “¿cuánto?”. Gestoras de fondos consolidadas, como BlackRock, están incorporando bitcoin a sus carteras.
Por lo tanto, el mercado ya ha superado ese punto en el que las gestoras se preocupaban por ser las primeras en ofrecer bitcoin entre sus activos. Los instrumentos para el trading se multiplican.
No son sólo los nuevos ETFs/ETFPs
Pero los nuevos ETFs no son el único combustible actual del trading en las criptomonedas. También encuentran soporte en una mayor claridad en la regulación y en la creciente aceptación por parte de gobiernos y compañías.
El entorno macroeconómico se está volviendo favorable con la reactivación del grifo monetario en un año de elecciones en Estados Unidos, así como los recortes de los tipos previstos en EE.UU. y Europa (Unión Europea y Reino Unido) a partir del mes de junio.
Pero, sobre todo, en el inminente halving del bitcoin, la llamada “reducción a la mitad” de abril de 2024. Centro de este proceso de reducción de la oferta, el número de bitcoins nuevos se reduce a la mitad cada cuatro años.
El cuarto halving podría provocar un choque entre la oferta y la demanda
El halving hace referencia a la recompensa que consiguen los mineros por resolver el algoritmo de prueba de trabajo (proof of work/PoW). Se prevé que esta recompensa se reduzca otra vez a la mitad este mes, tal y como está codificado en la “política monetaria” de bitcoin. Desde un punto de vista histórico, los halvings previos han generado subidas de precios antes y, sobre todo, después de la operación. Y esta es la calve para el trading actual. Tras los anteriores halvings se perciben en los 15 a 18 meses siguientes ganancias de:
- Unas 91 veces (9.106,5 %) en la primera.
- Unas 28 veces (2.782,0 %) en la segunda.
- Unas siete veces (684,3 %) en la tercera.
Incluso una ganancia pequeña (100%) desde los niveles actuales podría llevar al bitcoin por encima de los 100.000 dólares.
Los inversores y los que hacen trading (operan a corto) esperan que esto genere un alza sostenida de los precios, ya que los halvings previos han sido en la mayoría de los casos positivas y han contribuido históricamente a un incremento del volumen de operaciones, de la volatilidad del mercado y, sobre todo, de nuevas inversiones. No obstante, la volatilidad generalmente alta del bitcoin supone que muchos inversores se han visto a menudo atrapados en el “lado equivocado”.
Sin embargo, es posible que la tendencia al alza hasta ahora ya haya anticipado esta euforia. Por lo tanto, también es posible que los precios vuelvan a caer tras el halving. Vamos, que la operación podría no ser garantía de un trading al alza.
Atentos también a Ethereum
Pero no todo se queda en el bitcoin. El trading con criptomonedas también podría recibir un impulso por parte de Ethereum. Está previsto que este mismo año la red Ethereum realice su actualización Dencun “proto-dank sharding” (tras completar su fase final de pruebas a través de la red de pruebas Holesky).
Esto facilitará unas transacciones más económicas y veloces para soluciones de capa 2, lo que podría impulsar la adopción masiva del ecosistema. Esta clase de soluciones son protocolos que se ejecutan sobre la blokchain de Ethereum y gestionan las operaciones fuera de la cadena, agrupándolas y liquidándolas en Ethereum, lo que reduce tanto la concentración y como las comisiones en la red principal.Ethereum pretende que estas mejoras resuelvan el problema de escalabilidad que ha afectado a muchas blockchain y lograr así una ventaja sobre sus competidores, como Solana, que afirma ofrecer un mayor rendimiento y menores costes. La estrategia de Ethereum es la de convertirse en una blockchain descentralizada base que soporte una variedad de soluciones de capa dos y aplicaciones descentralizadas (dApps), creando un mundo web3 donde los usuarios tengan un mayor control, privacidad y libertad sobre sus actividades.